Insula Selima, illa de Santa Comba

04/05/2007, Fernan Gómez Filgueiras y Brage

​​

Insula Selima Cum Sua Eclesia. Monasterio Máximo Origen del Monacato Bretón Altomedieval Religión Antigua en Iaddonia

 

Introducción al contexto

El territorio en el que se encuentran estos vestigios culturales y arqueológicos pertenece a varios distritos de divisiones civiles y eclesiásticas como luego veremos; no obstante podríamos tomar como referencia un territorio cuya denominación contiene raíces étnico-religiosas antiguas que han influido en las sucesivas divisiones territoriales civiles y eclesiásticas romanas y alto-medievales, presentes aún hoy día. Mi elección para esta denominación del territorio se basa en estos precedentes culturales e históricos en un registro histórico singularmente significativo, Iadoni, de aquí Iaddonia, en donde, según el Documento de Tructino fechado en el 868 d. C. que corresponde al Cronicón Iriense de la diócesis de Iria, se sitúa Insula Selima cum sua eclesia, perteneciente a un territorio de la antigua dicha diócesis de Iria, nuestro Trasancos.

División Eclesiástica, Diócesis de Iria, 572 dC. (Parochiale Suevicum, P. David. López Alsina F.). En Besancos, Trasancos, sobre todo, hay topónimos antiguos de origen bretón

 

1. Registros documentales históricos

Orosio (VI 21, 6)

Después de los episodios del Mons Medulius, prosiguieron los combates en el norte de Galicia. Orosio (VI, 21, 6), se refiere a ellos como si hubieran tenido lugar en las partes boscosas norteñas de Gallaecia junto al Océano: Ulteriores Gallaeciae partes, quae montibus siluisque que consitae Océano terminantur.

Una de dichas Ulteriores Gallaeciae partes es el norte de Galicia, donde no hay epigrafía romana de nombres indígenas, las villas son tardo-romanas del siglo VI d. C., poco los registros romanos y en donde hay mas pervivencias culturales y culturales nativas de origen muy antiguo.

Historia natural de Plinio

Capítulo 34

Relación parcial de comunidades nativas en el norte del Conventus Lucensis, que reproduzco a continuación.

Después de pasar el río Navilibio (el rio Navia) hacia Occidente:

 […Ciuarci, Egouarri Namarini, Iadoni, Arrotreuae, Promontorium Celticum…]

 

Iadoni

Iadoni, es una fonética céltica latinizada, y de varias lenguas indoeuropeas, así en celta galobritonico Huddon (jadon), literalmente significa el que domina la magia (en el antiguo britonico Hud = mágico; antiguo córnico Hudol = mago, también en galés gwyddon = mago). En el indoeuropeo como en el antiguo Indo- Iranio esta testimoniado Yadu = dios mago y en el sánscrito (India) Jaddeses son magos sacerdotes dedicados al culto de los espiritus y genios o deidades menores. Es el equivalente a Druida, una adopción galo-romana, pues druida parece provenir, según varios investigadores, de dru-wydd (dare-vide), significa el sabio del roble y también en gales gwyd-don significa el sabio del árbol (gwydd), el serbal era inicialmente el árbol de los magos aunque después fué el roble.

Los Iadoni probablemente no eran una tribu sino una sociedad de los magos druidas del norte de Galicia que formaban una comunidad estructurada cuya capital o centro de reunión estacional, costumbre de muchas otras sociedades de chamanes y magos del resto del mundo, en un Medio-Lanum (lugar central o capital) parece ser que era, según los historiadores greco-romanos, la ciudadela de Libunca, situada en el monte de Ancos. IADONIA, o territorio de dominio de los Iadoni, debía de abarcar gran parte del norte de Galicia, incluida Ferrol y su comarca. Esto podría explicar entre otros detalles, la frecuencia de hallazgos de torques en el norte de Galicia, seguramente de Iadoni o magos y la resistencia a la romanización según los historiadores antiguos greco-romanos, con la activa participación del norte de Galicia en las guerras cántabras contra los romanos su resistencia a la romanización posterior hasta el siglo IV d. C., y es desde aquí cuando aparecen villas romanas tardías y evangelización cristiana.

Las referencias a los Iadoni están en las obras de Pomponio Mela, Plinio y Ptolomeo.

Casco de Iadón encontrado en Leiro (RIANXO). Museo provincial, castillo de San Antón, A Coruña
Goldenhatshiff erdstat (Centro Europa)

 

Entre el siglo II d. C. y el siglo IVd. C. los druidas fueron degradados y transformados en magos. IADONI, ya que se hizo prevalecer la religión del estado romano, primero y del cristianismo en siglo IV d. C., después, quedando los Iadoni como magos practicantes de la antigua religión, convertida así en prácticas supersticiosas y por ello en cultos marginales y perseguidos.

Es decir, como consecuencia de lo anteriormente expuesto, solo llegaron a la categoría de Vates y Bardos, luego a Lectores asimilados por el cristianismo, debido a su preparación, especialmente en la oratoria. Era tradición tres categorías de preparación para ser druida:

Amadauro Amateur, aspirantes, grado inicial, vestían túnicas amarillas.

Vate, segundo grado avanzado en el dominio de la sabiduría, tradiciones y la oratoria, vestían túnicas rojas.

Bardo, tercer grado avanzado en el dominio de rituales culturales, cánticos poesía, vestían túnicas azules.

Druida, cuarto grado superior, alcanzado con pruebas y ceremonias complejas, vestían túnicas blancas.

Los Vates y Bardos fueron hábiles en la oratoria, entre otras, y el paso a Lectores les fue propicio, habida cuenta de la asimilación cristiana propiciada entre estos directores espirituales del pueblo nativo, a la causa de Cristo. Además los Vates eran lo equivalente a un chaman porque también controlaban los rituales, sacrificios y vaticinaban por interpretación de actos de adivinación en los sacrificios y trances.

 

2. Vestigios cultuales precristianos

y cristianismo

De acuerdo con Henric D´Arbois de Jubain Ville (Le cicle Mithologique Irlandais et la Mithologie Celtique, 1981) y también con Kevin Jones (A consideration of the iconography of romano-celtic religión with respect to archaic elements of celtic mithology, BA. Archeology & History, 2001), opinamos que los celtas únicamente tenían un dios y una diosa primigenios, poli funcionales y multifacéticos, de aquí la cultura latina multiplicó los dioses celtas, sobre todo en la práctica cultual galo-romana, para asimilar mejor a los vencidos celtas de la Galia y Britania, en la política integracionista del estado romano. De una manera similar procedió el Imperio Romano en nuestras tierras.

De aquella religión prerromana aún en el siglo XX subsisten prácticas rituales y culturales en activo. Así como ejemplos de aquella religión, hoy llamados supersticiones tenemos:

—Ritos de fertilidad en el Marco de San Lorenzo (Larage, Cabanas), Pozo do Cabrón en Eirines y también en Leiro.

—Pelea ritual de los hombres de la parroquia de Ombre (Pontedeume), tenía lugar en el día del Espíritu Santo, que coincidía con la primitiva fiesta de los Maios célticos, se paraba a primera sangre.

—Ofrendas nocturnas de leche fresca del día a los trasnos de los bosques en un pequeño altar o repisa de piedras en el cruce de caminos del bosque vecino a la casa para que sacaran el mal que les aquejaba.

—Santa Compaña. Entre otras más creencias.

—Varias iglesias como San Miguel de Breamo (Pontedeume), Santa Maria de Cabalar (A Capela), San Esteban de Eirines, San Juan de Piñeiros en Franza, Caamouco, etc., son lugares en donde se realizaba el rito de las nueve vueltas con nueve mujeres y un hombre que recitaba junto con el enfermo o el peticionario, dependiendo de la intención (Cátedra, número 13, 2006, Pontedeume), son costumbres que también existían en la Bretaña Armoricana.

—Culto a Taranis-DisPater, del que los celtas, además, decían descender, también se le conocía por AndeRoudos (El Gran Rojo), de aquí Andrade “El Gan Rojo” y posiblemente la cabeza tetraposopa de Ponterdeume.

—Los marinos vikingos se encomendaban a THOR, equivalente nórdico de Taranis (El Rojo, y se le representaba todo rojo), cuando salían a navegar le imploraban para que los vientos les fueran propicios

—Es también Tarhundra de los Hititas y el Marduk de los Babilonios, con los mismos símbolos y atributos que Taranis y Thor. Sus signos mas representativos son: el rayo (en celta britonico taran), y la rueda de cuatro espirales o esvástica, que representa los cuatro vientos cardinales, muy confundida como rueda solar, ya que en origen los dioses masculinos celtas son dioses de la oscuridad u oscuros y se les representa por símbolos rojos o negros como el cuervo y otros animales simbólicos del Otro Mundo Tenebroso.

 

Jabalí // Cerdo, bestia emblemática: Registro arqueológico

Hallazgo, en la base, debajo del crisol, del horno metalúrgico de la isla de Santa Comba, de huesos de un cerdo joven. Probablemente de un sacrificio ritual ya que el cerdo y el jabalí representan una función dual de fertilidad o/y destrucción, por ello también era el símbolo de la diosa madre de la fertilidad, Ana, Dana o Don, también de los guerreros que los ostentaban en sus yelmos. Las crías del cerdo son muy frecuentes en registros arqueológicos rituales de yacimientos célticos europeos. También es de destacar su función psicopómpica de transporte de las almas al mas allá, al otro mundo. Otro aspecto importante es la relación con la Magia, la Metamorfosis jabalí//cerdo >> << humano y otros cambios relatados por los Gwyddión, Iaddonn, (Ovates), o Magos celtas, ya que era su animal simbólico. La morfología de sus esqueletos desprovistos de las pezuñas, tal como aparecen en los yacimientos célticos, recuerdan a un dragón alado y es así como se encuentran sus esqueletos en los enterramientos de sacrificios rituales para simbolizar su transformación en un ser fantástico, de aquí toda una serie de atributos míticos de estos animales. El cerdo o el jabalí son también los representantes simbólicos animalísticos de la diosa blanca Ana, Dana, Don, en la forma Ceridwenn, literalmente la cerda blanca, por ser la diosa una deidad solar pre-céltica.

Los cambios se produjeron con la llegada de los celtas indoeuropeos, que trajeron sus deidades solares masculinas y femeninas oscuras a nuestras tierras y como consecuencia de su fusión étnica y cultural con los pueblos pre-indoeuropeos que poblaban nuestras tierras, que tenían deidades solares femeninas y masculinas oscuras, a veces se produjeron deidades derivadas con doble función, muy típicas en la cultura celta, de aquí la confusión que se ha generado sobre estos temas en algún foro de estudio actual.

 

Inicio de la iglesia británica en el norte de Galicia

Aunque hay referencias puntuales de la llegada de un pequeño grupo religioso de bretones, esto no explica la gran difusión britana en el norte de Galicia que podía estar indicada por una conjunción de sucesos en la caída del Bajo Imperio Romano reflejados en la crónica Cronicón de Hidacio, obispo de Chaves, al norte de Portugal, cerca de la frontera con Ourense. Los bagaudas, jornaleros nativos, junto con los suevos lograron la caída de Lugo en el 460 d. C., por otra la acción de los cuerpos móviles brito-rromanos cominnitatis en ayuda de los limmitanni de las fortificaciones romanas y los ejércitos de los grandes terratenientes en la Galia y también probablemente en Galicia, es la posible causa de que un cuerpo breton de cominnitatis se asentara en estas tierras con el motivo de la guerra que el rey suevo Rekhiario junto con los bagaudas locales, mantuvo a mediados del siglo V, contra los galaico romanos del norte de Galicia que probablemente pidieron ayuda a uno de los cominnitatis de Britania.

Más clara está la presencia de la Iglesia Británica en el norte de Galicia como queda reflejado en los concilios alto-medievales, en los que se presentan obispos bretones de la diócesis de las iglesias Britonienses o Lan Brethen.

—Así en el 572 d. C.: II Concilio de Braga (12/12)[ Mahiloc Britaniensis eclesiae episcopus hic gestis ss.].

—589 d. C.: III Concilio de Toledo (24/63) [Ermaricus Laniobrensis eclesiae episcopus subscribsi].

—633 d. C.: IV Concilio de Toledo (50/62) [Metopius eclesiae Brittaniensis episcopus subscribsi].

—646 d. C.: VII Concilio de Toledo (23/30) [Sonna sancta eclesiae Britanensis etsi indignus episcopus haec statuta definiens subscribís].

—653 d. C.: VIII Concilio de Toledo. Item Vicaria episcoporum (10/11) [Mactericus presbyter Sosani episcopi eclesiae Britaniensis].

—675 d. C.: III Concilio de Braga. (5/8) [Bela Britaniensis eclesiae episcopus his constitutionibus interfui et subscribis].

—681 d. C.: XII Concilio de Toledo. (23/27) [Ego Vitulacius eclesiae Laberricensis episcopus ss. ]. (Aqui Laberricensis probablemente sea derivado de Lan-brethonic- ensis)

—683 d. C.: XIII Concilio de Toledo. (42/47) [Brandila Lamniobrensis episcopus similiter]. 693 d. C.: XVI Concilio de Toledo. (10/58) [Suniagissus Lamiobrensis episcopus ss.]

Aquí laniobrensis y también lamniobrensis, lamiobrensis, desde laniobria, son una mala escritura latinizante de la fonética bretona de las palabras lan brethen, (pronunciadas originalmente de la forma lann brieen, que por latinización han dado laniobria), quiere decir iglesias de los bretones.

En cuanto a los nombres de los obispos y vicarios bretones que aparecen en los concilios son también de origen bretón, pero latinizados. Así Mahil-oc significa el joven monje calvo, debido a la tonsura céltica. Estos obispos britonienses no son en realidad más que el abad de un monasterio, que ejerce de monje apostólico desde su monasterio para las iglesias de las comunidades bretonas del norte de Galicia, es decir, es un guía o director espiritual, un rasgo especial de la tradición druídica.

Otro detalle a tener en cuenta es el hecho de que en los documentos alto-medievales, salvo algunas raras excepciones, no se nombran las advocaciones de las iglesias bretonas, es decir, no se conocen sus advocaciones en ninguna lista, solo se dice “ecclesiae Brittaniensis”, las iglesias britanicas. La causa de esta ausencia de santos patronímicos puede ser porque en general eran simplemente oratorios de comunidades cerradas o su santoral era otro muy particular, el bretón, distinto del hispano-visigótico. Este podía ser el caso de Insula Selima cum sua ecclesia, que no tiene advocación.

Estos serían también unos indicios de la pervivencia de la lengua bretona durante varios siglos en el norte de Galicia, incluso hasta el siglo XIII d. C. como se refleja en varios documentos, uno de los últimos es un especial documento del siglo XIII, publicado en facsímil por Pensado en 1960, que incluye instrucciones para guías, de cómo dirigirse a los peregrinos de Santiago, en occitano, italiano, hispano y bretón. Posiblemente el Camino Inglés no es más que un antiguo camino real de los bretones a Santiago.

 

Condena de la tonsura de los lectores alto-medievales del norte de Galicia

Orden clerical: Grados del sacramento que se van recibiendo sucesivamente.

Ostiario > Lector > Exorcista > Acolito > Subdiacono > Diacono > Presbitero (sacerdote).

alba o sobrepelliz, bata blanca.

Vestimenta de los lectores.

El blanco era también el color de las túnicas de los druidas.

La tonsura tuvo varios estilos al principio, porque derivaba de la asimilación de los sacerdotes paganos a la doctrina cristiana a raíz del edicto de Constantino, luego la que se llamó romana o de San Pedro fue la que se impuso. Se le practicaba cualquiera de ellas, al principio, a todo aquel que entraba en la orden de los clericales, fueran del grado de fueran. Así la anécdota, el rey visigodo Leovigildo captura (585 d. C.) al último rey suevogalaico, Andeca, al que hizo tonsurar, (entra a formar parte de la clerecía), así inhabilitado para reinar, lo envió al cenobio de Pax Iulia (Bejar).

Entonces la tonsura de los lectores del norte de Galicia, ¿Era una tradición local o una tonsura importada?, pudiera ser que los Iadoni del norte de Galicia, aunque parcialmente convertidos y romanizados seguían existiendo revitalizados por la doctrina priscilianista, o que fuera un estilo caducado de tonsura, o que la trajeron los bretones desde la tradición druidica británica, esto fue lo mas probable.

Resalta la condena de la tonsura local, cuando al mismo tiempo asistía al IV concilio de Toledo el primer obispo bretón, Mahiloc, de las diócesis bretonas del norte de Galicia, pero también se hace referencia a que dicha tonsura se llevó antes por los ya condenados herejes priscilianistas. De esto se puede deducir que primero fueron los Iadones nativos locales y luego los lectores bretones, los que llevaron el mismo estilo de tonsura céltica.

 

Concilio I de Braga 561 d. C.

XI. De lectoribus eclesiae. [Quod lectores neque in habitu saeculari psallere neque grados dimittere permitantur.] Item placuit, ut lectores in eclesia in habitu saeculari ornati non psallant neque granos gentili riti dimittant.

 

XI. De los lectores de la iglesia. Que se prohíba a los lectores cantar en traje seglar ni dejarse crecer el bigote. También se tuvo por bien que los lectores en la iglesia no canten vestidos con traje seglar ni se dejen rizos al estilo profano.

 

Concilio IV de Toledo 633 d. C.

XLI. [De qualitate tonsurae a cunctis clericis vel lectoribus habenda.] Omnes clerici vel lectores sicut levitae et sacerdotes detonso superius toto capite inferius solam circuli coronam reliquant, non sicut hucusque in Gallaeciae partibus facere lectores videntur, qui prolixis ut laici comis in solo capitis apice modicum circulum tondunt, ritus enim iste in Spanias haereticum fuit; unde oportet ut pro amputando ecclesiae sacndalum hoc signum dedecoris auferatur, et una sit tonsura vel habitus sicut totius Spaniae est usus. Qui autem hoc non custodierit fide catholicae reus erit.

 

XLI. Forma de la tonsura que han de llevar todos los clérigos y lectores.

Todos los clérigos y lectores, lo mismo que los levitas y obispos, rapada toda la parte superior de la cabeza, dejaran solamente una corona circular en la parte inferior, y no como hasta aquí parece ser que hacen los lectores en partes de Galicia, los cuales dejando largos cabellos, al modo de los seglares, rapan un circulo en la parte superior de la cabeza, pues este fue el uso de los herejes en Hispania. Por lo cual conviene que a fin de acabar con el escándalo en la iglesia, se omita esta señal indecorosa y que sea una misma la tonsura y el hábito, del mismo modo que es una sola la costumbre de toda Hispania, y aquel que no guardare esto será reo de la fe católica.

 

Fin oficial de la tonsura celta cristiana.

La tonsura druídica desapareció oficialmente en Galicia en el 633 d. C. debido a la condena en el IV Concilio de Toledo como referimos anteriormente, en Gran Bretaña con el concilio de WHITBY en el 664 d. C. se inicio la condena y supresión oficial culminando en el siglo VIII, en la Bretaña Armoricana en el siglo IX y en Irlanda del Norte en el siglo XII. Pero el espíritu céltico- cristiano dejaría su huella.

Al parecer, la tonsura celta consistía en rasurar la parte anterior de la cabeza por delante de una línea que iba de oreja a oreja, dejando una melena en la parte posterior. Es un recuerdo de la tonsura druídica.

 

Monacato de pactum.

Bisko (1951), publicó que fue frecuente en Galicia un monasticismo de Pactum, pacto, en el que la comunidad monacal era gobernada democráticamente según un Fuero redactado entre el Abad y los monjes. Un rasgo del espíritu participativo de las comunidades monacales bretonas, derivado a su vez de su remoto origen, en la evangelización por el cristianismo de origen oriental, especialmente el copto de Egipto, como ya demostraron varios investigadores.

El abad no tenía por qué ser un religioso sino que podía ser un laico, un rey, un jefe local o de la comunidad bretona, un señor de una villa alto-medieval; que proporcionan un lugar, generalmente un antiguo castro, como asentamiento (Sedhas Lios sél) de la comunidad monacal, quedando bajo su protección e incluso gobierno, proporcionándole lugares de cultivo, los Luwor, también dentro de antiguos castros, costumbre nativa para defender los cultivos de los animales salvajes, que aun estaban en vigor en el siglo XX. Por ello aparece asociada una villa y una tierra de labor, Luwor, a muchas de nuestras antiguas iglesias alto-medievales supuestamente bretonas. El aprovechamiento de antiguos castros para asentamiento de estas comunidades monacales viene determinado por la presencia de las pequeñas casas castreñas usadas como cellas para los monjes y el templete del castro reformado para oratorio de la comunidad.

La Iglesia bretona era rural y la romana era urbana, es por el estilo de aquella que lo ártabro y lo bretón han quedado fundidos para siempre en la historia de nuestra tierra.

La iglesia británica tiene un origen oriental, Egipto, Siria y Bizancio, a través de Anastasio de Alejandría, Hilario, etc, con el evangelio de San Juan y con San Juan Bautista como referencia espiritual, que a su vez fue origen de apostolicismo cristiano posteriormente con el modelo de la Iglesia Gálica. Ninian extendió en Britania la escuela de monasticismo de San Martín de Tours, y entre otros el singular mérito apostólico del bretón San Patricio, patrón de Irlanda. Esta iglesia apostólica céltica irradió cristianismo en el occidente europeo en la Alta Edad Media.

 

Vestigios alto-medievales de monacato bretón en el tumbo del monasterio de San Juan de Caaveiro:

Donaciones y concesiones de San Rosendo al Monasterio de San Juan de Caaveiro en el 936:

Es, a mi entender, un intento de restaurar un Lan Bretón con el antiguo Territorio Bretonia y su antiguo cenobio episcopal de San Juan de Caaveiro.

 

En este documento de ca. 936 d. C. del tumbo del monasterio de Caaveiro (A Capela), San Rosendo, Rudesindus, hace donación, Donamus, de unos objetos de culto al abad y a los monjes de San Juan Bautista de Caaveiro,  (ACapela), además de conceder, concedimus, unos libros de culto pro animabus nostris. Por otra en el mismo documento se hace concesión, Concedimus, de dominio del Territorio Bretonia, ya citado en un documento del 914 d. C. del tumbo de dicho monasterio, a dicho monasterio citando con las poblaciones que lo integraban, la mayoría de las cuales persisten hoy día en el municipio de A Capela, prácticamente inalteradas.

 

Pervivencia del monacato bretón

Además de cómo queda reflejado con los concilios visigóticos y con San Rosendo, tenemos un documento de 1192, del tumbo del Monasterio de San Juan Bautista de Caaveiro.

Al final del documento firman tres presbíteros de tres iglesias que no tienen advocación de santos, que además ellos son monjes, en el documento aparece Moogo de monaco, es decir, monje, en breton mog. En el ayuntamiento de Mañon, antes Mannon, vecino de Ortigueira, antes Orc-tumgar-ia, aparece la localidad de Mogor que antes era Monachorum, en la colección diplomática del Obispado de Mondoñedo.

 

[Qui presentes fuerunt: Froyla Moogo, presbiter de Lago, cf. Didacus Moogo de Ceruales, presbiter cf. Suerius Moogo de Moesti, presbiter, cf.

 

Lago es hoy Santiago de Lago (Valdoviño). Ceruales es hoy Cervás (Ares). Moesti es hoy Moeche.

 

Sede Mindoniense sucesora de la Iglesia Britana del Norte de Galicia

En parte si lo es pero hay que tener en cuenta que el apelativo de Dumiense se debe a que en realidad los de San Martín de Dumio, Braga (Portugal) se refugiaron de la invasión árabe en la diócesis de la iglesias Britonienses, fundando San Martín Dumiense en la costa de Lugo, y una vez destruida la Britonia de Meira (Lugo), tomaron el relevo. Pero en cambio la Britonia de A Capela (A Coruña) sobrevivió.

 

San Rosendo un obispo restaurador de las Sedes Britoniensis

Un ejemplo de esto son las donaciones y concesiones territoriales en el 938 d. C., del antiguo Territorio Bretona, que hizo al posiblemente antiguo monacato bretón de San Juan Bautista de Caaveiro (A Capela), comentadas anteriormente.

 

3. Registros toponímicos

Para una explicación complementaria más extensiva y detallada, ver mis artículos en los anteriores números de la revista Columba (Cobas) y los números 12 y 13 de Cátedra (Pontedeume)

Los castros pequeños, de colonización de los valles, una vez abandonados, son reutilizados en nuestra zona, rellenándolos de tierra, para cultivos de hortalizas, protegidos y así defendidos de los jabalíes y otros animales, serían los luwor en britonico medv. (luure > lubre o lobre). Los de tipo grande serían utilizados para asentamientos alto-medievales monacales, serian los britonico-medievales, sedhas lios (see-lii > sél en córnico- britanico altomedieval).

 

También en la Cornisa Cantábrica y Pirineos Occidentales (Asturias, Cantabria, País Vasco, Pirineos Occidentales): Seles, sel, selear, seelis, parcela de pastizal o lugar de confinamiento de montaña a donde se llevan los ganados en verano.

Debido posiblemente a influencia de pastores célticos transhumantes. Atítulo de ejemplo: 817 Oviedo, Bec. Gót., fol. […seles…]; 853 Asturias (Esp. Sagr., 37, p. 231. [… seles…]; 1011 Oña (Col. Dipl., 1, p. 36, [… seelis…].

 

Hay que hacer la observación de que los bretones de Britania, como los que llegaron aquí en el siglo V o VI, en la Alta Edad Media, eran esencialmente ganaderos antes que agricultores, es una de las razones de que su cristianismo era esencialmente rural y no urbano como el cristianismo romano.

 

Santa Eulalia de Lubre (Luure), Sillobre (Siloure), Barallobre (Baraloure), Sillobreu (Silouree), Tiobre (Tiuure < Tiluure), Obre (Ooure < Oloure). Desde Luwor o también desde Lios Bretz.

 

Ombre (Anoure < Ano-briga; por otra parte puede ser Annor- eve < An nor avom;

Arciprestazgo de Selagia (hoy Seaia), en el norte de A Coruña. Moralejo lo hace derivar también de Sed Lis—.

 

insula selima (illa ou insua de Santa Comba, Cobas, Ferrol) Documento de Tructino (circa 868 d. C.), lista de iglesias de la diócesis Iriense. Insula Selima cum sua eclesia. (López Alsina F., 1988)

 

Insula SELIMA cum sua eclesia, en territorio de Trasancos, (Tructino, 868 d. C.), Lopez Alsina F., da como probable a Illa de Santa Comba en Cobas.

Yo comparto la misma idea, pues es la única isla con iglesia, en el Territorio de Trasancos, que además tiene vestigios arqueológicos de un monacato alto- medieval, como se va confirmando entre otras excavaciones, como la del 2001, con el hallazgo de tumbas alto-medievales en las recientes excavaciones de Julio del 2006.

 

Interpretación del antiguo y genuino topónimo de la Isla de Santa Comba, selima. SELIMA deriva posiblemente del britonico sedhas lios-am (pronunciado see – li i– am, (-ham < -sama, superlativo en britónico y en galo antiguo), significando (see-li-ma > = La Gran Sede o Gran Lugar, en sentido cualitativo), una ciudadela de gran importancia religiosa y civil en todos los tiempos antiguos. Es muy posible que fuera el Monasterio Máximi del Parochiale Suevicum de las comunidades bretonas, convocadas con su obispo Mahiloc (Maeloc) al concilio II de Braga, del 572 d. C. Por otra el oratorio de la primitiva comunidad monacal esta asentado sobre un antiguo templo pre-cristiano como era habitual en estos casos de reutilización de castros por comunidades monacales. Como indicio de ello en las excavaciones de Julio de 2006, se encontraron inserciones de postes de madera de apoyo de la techumbre en la planta del cimborio de la actual capilla, era el antiguo oratorio, restos posiblemente típicos de un templo circular con un pasillo de entrada rectangular, sería el segundo caso que conozco personalmente, lo cual vendría a confirmar la costumbre de los asentamientos monacales británicos alto-medievales.

Jabalí transformado en cordero pascual, con cruz yuxtapuesta. En el frontal de la fachada oeste (figuras remarcadas). Iglesia de Doniños
Jabalí transformado en cordero pascual, con cruz yuxtapuesta. En el frontal de la fachada oeste. Iglesia de Doniños

Otra posible interpretación del arcaico topónimo selima: selima, también puede derivar de un culto ártabro-romano a la diosa galo-romana sulis (Sul-leagas, literalmente El ojo del Sol, repárese en el galego legaña), que es una manifestación de la diosa madre solar Ana, Dana o Dón, culto bien atestiguado en Bath en Gran Bretaña y otras de la Galia, así por ejemplo, se conoce un santuario en la Bretaña Armoricana con el nombre de sulim, que parece provenir de sullissama, con el significado de El Gran Ojo de Sul (el sol), aquí hay que aclarar que en la mitología céltica el Sol es una diosa, una deidad solar femenina, Ana, Dana, Dón, es decir, que Sulis es una faceta funcional de la diosa blanca y no otra diosa con este nombre de Sulis, como así la presentaba la mitología clásica. El dios, deidad masculina, era en cambio una deidad de las tinieblas, el Taranis-Dispater galo-romano. Fonéticamente en las lenguas célticas es posible el cambio Sulissama a Silima y luego a selima, de ser así, sería nuestro santuario, cuyos restos anteriormente comentaba, un equivalente al céltico de la diosa galo-romana sulis, en nuestro caso posiblemente debido a la metalurgia, pues en funcionamiento los hornos metalúrgicos encontrados en la isla de Santa Comba en el 2001, por sus bocas o tragantes, ojos de los hornos, resplandecerían en la noche de aquellos tiempos, de hecho selima (Sullissama), significa también “la muy resplandeciente”.

Esto podría ser la causa de la posterior advocación a Santa Columba de Sens, Francia, como contraposición al vestigio del nombre pagano de Selima en nuestra isla, ya que dicha advocación aparece en el siglo X, como consecuencia posiblemente de las peregrinaciones, junto con San Silvestre y San Esteban, en tres altares respectivos, en la Iglesia de Santa Maria da Corticela, (precedente de la canónica de Santiago del siglo XI), formada por el obispo Sisnando y colocada bajo el patrocinio de San Esteban. Antes en Santa Comba, Santa Columba, de Cobas, se celebraba la fiesta el día de San Silvestre, bueno, mejor en la noche de San Silvestre el 31 de diciembre.

* En conclusión, las dos anteriores interpretaciones vienen a coincidir en asignar a la Insula Selima, el significado de un gran lugar religioso en la Antigüedad, un excelente valor patrimonial de nuestro pueblo.

 

En el mismo contexto histórico debe situarse San Román de Doniños. Así en el documento altomedieval del Tumbo del Monasterio de San Martín de Tartares (Juvia): Cita del año 1135 d. C.: [… de sancto Martinho Romano de Dunios…] A.H.N., 33, fol vto., ld. 11-23.

Primitivo dintelado de la puerta norte en el muro norte
Primitivo dintelado de la puerta sur con gozne rellenado, muro sur

San Martiño Romano, San Román, es el San Martín de Tours del siglo IV d. C., puesto que dicho santo fue antes un centurión romano nativo de la Galia, por ello se le representa vestido de legionario romano con una capa de centurión, dicha capa fue la que donó a un pobre en la Galia como primer gesto de su conversión al cristianismo.

San Martiño Romano, de Dunios/ Donius (Dón > Duinn > Dunios , diosa Dana o Ana de los celtas), luego San Román Donni- anus, dio San Román de Donninos, actualmente San Roman de Doniños. Es una posibilidad muy fuerte puesto que en el frontal del actual templo se conserva una piedra con un relieve de un jabalí, transformado en el cordero pascual, con una cruz sobrepuesta por cristianización. El jabalí es también una representación simbólica animalística druídica de la diosa blanca precéltica y céltica, que tiene como sobrenombre en varios registros célticos como Cerid-wen, la jabalina o cerda blanca. Junto con otros detalles en las paredes de dicho templo me hacen sugerir un antiguo templo de culto druídico a la diosa blanca, Ana, Dana o Don, ya que el jabalí es el animal totémico de los druidas y de los guerreros celtas. Esto entra en posible concordancia con el anteriormente comentado tema de los Iadoni. Por otra, el lago de Doniños sería una entrada al abismo del reino de Ana o Dana, Don, la denominación de abismo en aquella lengua antigua era también el de Domnu.

 

4. Registros arquitectónicos Disposición esquematica funcional de la arquitectura de nuestras iglesias cenobiales.

Dimensiones usuales de las primitivas iglesias britónicas, que tuvieron un origen en el cristianismo oriental, es decir, Asia Menor, Grecia y el antiguo Egipto cristiano Copto:

Son pequeñas iglesias que en origen fueron pequeños oratorios o capillas de seis a doce metros construidas en mampostería con remarcado en piedra tallada y asentada. Posteriormente se les adosó una nave rectangular que disponía de una entrada principal hacia el oeste y una puerta norte de gran simbolismo, todo el conjunto orientado de oeste a este, hacia Jerusalén.

 

LA PUERTA NORTE DE LAS IGLESIAS ALTO-MEDIEVALES

Por la Puerta norte entraban los no bautizados al ritual del Bautismo, a la Luz de la Fe, la pila bautismal se colocaba ante esta puerta precisamente. Es una costumbre que aún se puede detectar que hubo en iglesias antiguas de Galicia, pues algunas disponían de ella, solo quedan restos arquitectónicos, y otras aún disponen, de una pequeña Puerta norte practicable.

Al desaparecer las pilastras de madera, los arcos de medio punto son ojivalizados para resistir el empuje de la techumbre
Disposición esquemática funcional de la arquitectura de nuestras iglesias cenobiales

Hay vestigios de dicha puerta en Santa Comba de Cobas y San Román de Doniños, pero existe todavía con los restos de la base de la pila bautismal con sus ranuras para sujetarla, en la iglesia de Santa Eulalia de Lubre, en Ares y también en Santa Comba de Bande en Ourense aún se conserva entera la pila bautismal con sus acanaladuras de sujeción férrea, ya que estas pilas bautismales estaban en el exterior enfrente la Puerta norte. San Martín de Mondoñedo también conserva la pequeña Puerta norte aunque tapiada y sustituida por otra puerta de tamaño mediano, en el mismo muro norte, Santa María de Doroña la tenía practicable hasta no hace mucho.

El norte en el simbolismo antiguo es la región de la oscuridad y de las escarchas y los bárbaros, estaba dedicado a Satán y al reino de la Ley Antigua.

 

SELIMA, UMHA PORTA NORTE CARA A LUZ DA HISTORIA

 

 

Ferrol, a 31 de decembro do 2006
Fernan Gómez Filgueiras y Brage

 

<< Volver